Ciudad de Buenos Aires, 10 de Septiembre  de 2020

El Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo atravesó muchas dificultades desde que se designó el Rector hasta que se cubrieron todos los cargos que acompañan esta gestión.
El primer objetivo -y el que jamás se perdió de vista- es el de reparar la afectación al derecho laboral de los y las docentes que forman parte de esta comunidad académica.
Comenzamos nuestra gestión con permanente diálogo entre los distintos actores de este Instituto para que lo consideremos como un proyecto colectivo (tanto los y las trabajadores docentes como los y las no docentes y los y las estudiantes) horizontal y no vertical. Así venimos transitando estos meses complicados en el que nos atraviesa una emergencia sanitaria excepcional y global.
Del mismo modo que atendemos el reclamo de los y las trabajadoras, lo hacemos con los derechos que le corresponden a los y las estudiantes que integran esta casa de estudios.
Este equipo de gestión que me toca encabezar no pierde tampoco de vista que lo que nos fortalece es la unidad y que el compromiso de esta Institución es con una educación pública y gratuita, con ampliación de derechos, con inclusión social como herramienta de transformación.
Por primera vez en este Instituto Universitario Nacional, las Madres de la Plaza forman parte de este equipo, nos enseñan y nos muestran el camino en este proceso de transformación.
Nos tocó asumir la conducción de esta Institución con una emergencia sanitaria inédita y con una deuda salarial de docentes que heredamos.
El proyecto hacia adónde vamos incluye a todos y a todas los que comparten aquella idea de vivificar la experiencia de las Madres en la defensa irrestricta de los derechos humanos y que creen que la educación es una pieza fundamental de ese andamiaje.
Nos sentimos respaldados por los titulares del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, de la Secretaría de Derechos Humanos y del Ministerio de Educación de la Nación para que aquellos derechos que fueron otrora vulnerados se reparen de ahora en adelante.
Nos podremos equivocar en muchas cosas, pero tenemos en claro que no se construye una educación inclusiva sin un proyecto que no sea colectivo.
Esta Argentina de pie necesita de todos y de todas; este Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos necesita, en particular, que las Madres estén con nosotros y nosotras y fundamentalmente, que nos guíen.
Las Madres de la Plaza son nuestra brújula ética; los compañeros y compañeras detenidos/as-desaparecidos/as, que son sus hijos e hijas, están presentes, ahora y siempre.

Dr. Rodrigo Codino
Rector Organizador del Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo.